Según la RAE, la amistad es afinidad, conexión; afecto personal, puro y desinteresado, compartido con otra persona. Hay muchos tipos de amistades, pero en esta oportunidad nos vamos a centrar en esas “con derecho”. 

Hoy es muy común escuchar hablar de “amigxs con derecho”, esos vínculos que combinan el aspecto afectivo, típico de una amistad, con la posibilidad eventual de tener relaciones  sexuales sin compromiso de pareja. 

Una relación que no es relación 

Muchos atribuyen este tipo de amistades a querer esquivarle al compromiso real de una pareja, a no perder libertades o al rechazo del otro si se declaran los verdaderos sentimientos (más conocido como: quedar en la “friendzone”). Otros en cambio, encuentran en estas relaciones una pareja sexual ocasional pero conocida. 

La razón por la cual se dan este tipo de vínculos no es relevante siempre y cuando las reglas se establezcan desde un primer momento. En este punto es importante hacer una aclaración: no tener compromisos como pareja no significa no tener responsabilidades a la hora de tener relaciones sexuales.

Hoy en día, lo más importante es la responsabilidad afectiva y el cuidado mutuo. Sea quien sea nuestra pareja sexual es necesario cuidarnos. Por eso, a los festejos y reencuentros por el día del amigx, además de llevar tapaboca y alcohol en gel tenemos que llevar preservativo. Nunca se sabe cuándo podemos cruzarnos con nuestros “amigxs con derecho” y terminar la noche celebrando la amistad con “derecho a roce”. 

No importa con quién, siempre tenemos que cuidarnos y cuidar al otro

“No se siente lo mismo” o “arruina el momento”, suelen ser algunas de las excusas más comunes para no usar o retardar la colocación del preservativo, uno de los inventos más importantes de la historia. Si, de la historia. 

Los primeros prototipos de condones aparecieron 1000 A.C. en Egipto. Consistían en una tripa de animal anudada en un extremo. Con los años y los siglos fueron evolucionando: primero de lino, después de caucho y ahora de látex. Si bien los primeros tenían otro propósito, los preservativos actuales además de evitar embarazos previenen la transmisión de diferentes infecciones, como el VIH.

El preservativo es el único método que previene las infecciones de transmisión sexual. Tanto el peneano como el vaginal (no es fácil de conseguir en Argentina, otro factor de desigualdad de las mujeres cis para elegir cómo protegerse en el sexo), deben usarse durante toda la relación sexual. Esto incluye el juego previo y el sexo oral, ya que todo fluido sexual puede transmitir infecciones. Para el sexo oral vaginal o anal podemos utilizar un campo de látex.

Juntos podemos frenar la pandemia del VIH

Tener sexo seguro es la forma más eficaz para prevenir tanto la transmisión del VIH como de otras ITSs. Algunas de ellas pueden ser curables y otras no, algunas tienen síntomas obvios y otras no. Por eso, además de usar preservativo en todas tus relaciones sexuales es importante que te realices el test de VIH de manera frecuente. 

Sea cual sea el método anticonceptivo que uses, el preservativo es el único que previene las infecciones de transmisión sexual. Por eso es importante que sepas cómo utilizarlo correctamente. 

Uso correcto del preservativo Peneano

  1. Revisá la fecha de vencimiento del preservativo.
  2. Usalo desde el comienzo hasta el final de la relación sexual.
  3. Abrí el sobre con cuidado para que no se rompa el preservativo. No utilices elementos cortantes ni lo abras con los dientes.
  4. Apretá la punta del preservativo para sacar el aire antes de apoyarlo en el pene erecto. 
  5. Desenrollalo hasta la base del pene, cuidando que no quede inflada la punta.
  6. Usá solo lubricantes “al agua”, ya que son los únicos compatibles con el preservativo y son recomendables sobre todo para sexo anal.
  7. Luego de la eyaculación, retirá el preservativo con el pene todavía erecto. Tené cuidado de que no se derrame el semen.
  8. El preservativo debe ser usado una sola vez. Tiralo a la basura, no al inodoro.

Entre más conoces tu cuerpo, tus parejas, sobre sexo seguro y VIH, mejor preparado estás para protegerte de las ITS. Hablá con tu médicx y si tenés alguna duda hacete el test de VIH. Buscá el centro de testeo más cercano en nuestra web y pedí tu turno 

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